Cristina Proano-Carrion
C.H. Dip. Aroma
Al haber nacido y crecido en la capital de Ecuador, Quito, los recuerdos de Cristina siempre se relacionan con los olores de su lugar natal. Cristina, una aromaterapista profesional desde 1994, recibió su Diploma de Salud Alternativa en Aromaterapia en 1997 en el Centro Kevala del Reino Unido. Luego continuó con sus estudios avanzados en 1998, a través delPrograma Internacional de Entrenamiento en Aceites Esenciales en la Universidad de Purdue en Indiana.
Cristina tiene más de 25 años de experiencia formulando productos de aromaterapia para la industria hotelera, de spas y gimnasios en los Estados Unidos, y hablando a audiencias de Norte y Sud-América en televisión y en radio, así como en seminarios y talleres.
Ella está ansiosa por compartir sus conocimientos y su exitosa experiencia con sus lectores y alumnos.
Actualmente Cristina reside en Gainesville, Georgia, Estados Unidos, donde ella misma fabrica a mano toda su línea Aromandina. La línea Aromandina se vende a través del internet y tiene clientes que van desde Alaska hasta Uruguay.
Qué dice Cristina acerca de su trayectoria como aromaterapista:
«Después de conocer a una persona que distribuía aceites esenciales en Colombia, le pedí si podía ser su representante en el Ecuador. Pensé que sería simplemente un trabajo aparte, casi como un pasatiempo, nunca me imaginé que sería el paso más importante que he dado en mi vida.
Estaba extremadamente fascinada con los aceites esenciales y sus efectos. Pronto mis parientes y amigos se convirtieron en mis conejillos de indias, leía tantos libros como podía hasta que me tomé un curso avanzado y un diplomado en aromaterapia por correspondencia.
Lo que cambió mi vida fue que después de 4 años de tratar de quedarme embarazada descubrí que los poderes terapéuticos de los aceites esenciales pueden ayudar a equilibrar el sistema hormonal, desintoxicar tu cuerpo y proveer un sentido general de bienestar para tu mente, tu cuerpo y tu corazón. El resultado fue que después de un mes de aplicar una mezcla de aceites esenciales me quedé embarazada de Juan Martin y durante todo el embarazo, el nacimiento de mi hijo y sus 13 años solamente he usado aceites esenciales. El resultado es un niño saludable que nunca ha necesitado antibióticos porque nunca ha tenido una infección o enfermedad grave. Esta experiencia ha sido compartida con muchas audiencias en la TV la radio y en seminarios tanto en Ecuador como en los Estados Unidos»